En Estados Unidos van un poco por delante, pero es muy interesante porque podemos ver lo que va a pasar en Europa. Dicho esto, no creo que España vaya con mucho retraso sobre el resto.
Principalmente, ha habido dos cambios importantes. El primero es la tecnología, que nos permite automatizar los procesos y reducir el trabajo humano. Al reducir el trabajo humano reducimos costes y con menos costes podemos hacer servicios asequibles para más gente.
Donde en banca privada típicamente tienes una persona que está haciendo operaciones manualmente que implican muchos costes, la automatización permite hacerlo a diario para decenas de miles de clientes con un coste mucho más bajo. La automatización nos permite ir a inversiones mínimas más bajas.
El segundo factor también es muy importante y es internet, ya que nos permite hacer una distribución directa, en la que el inversor contrata el servicio directamente en la web, lo que nos permite saltarnos la red de distribución que tienen los grandes grupos bancarios y toda esta red de sucursales con agentes, directores de sucursales, banqueros privados…
Los bancos tienen costes muy altos, en parte porque están poco automatizados todavía, y en gran parte porque tiene una red de distribución que les cuesta el 80% de lo que tienen que cobrar al cliente.
Con Indexa Capital y las iniciativas en general de servicios de inversión más automatizados y online, reducimos esos costes: podemos cobrar menos al cliente y también podemos permitir empezar a invertir con una inversión mínima más baja.